El Diario de un Hombre Ermitaño - Episodio 29 "Mil frases profesadas en una noche de amores contrarios"
En honor a las
confesiones de media noche de una amiga y sus recuerdos…Gracias por darme la
idea Patricia
"Suelo decirte hasta de lo que soy culpable... Pero por
ahora solo te diré que hay veces en donde uno se cansa de que nadie pueda
llegar hasta donde uno cree que deberían, solemos obviarlo todo, encerrarnos y
ni siquiera darnos una oportunidad...
A veces tan sólo queremos aprender a mal..."
Estas son las
palabras que resonaban en mi mente en esta noche en la cual escribo, palabras
que nacieron y brotaron del interior y resonaban en un tono constante y
agravado,
como si tan solo
esas palabras bastaran para hacer sentir vulnerable, desnudo, humano a
cualquier persona que las escuchará, fueron palabras tan sabias y profundas que
albergaban en esencia y en lo oculto, el idilio interminable de aquel amor que
nunca olvidamos, aquel amor que obviamos y ocultamos a pesar del tiempo y de
todas aquellas personas que pasan por nuestra vida, aquel amor del que nos
sentimos culpables por nuestras acciones y aun así al mirar a esa persona sin
importar el transcurso de los días, meses o años, sigue siendo el actor o
actriz principal en nuestra historia.
Como olvidar a aquella
persona que nunca necesitaron levantar la voz, nunca necesitaron ser ofensivos,
simplemente le bastaba un pensamiento específico y certero para hacernos
guardar silencio, dejarnos emocionales y dar por terminada a aquella jornada de
argumentos contrariados en las relaciones.
Esos son los amores
que no solemos olvidar nunca y lo digo con la certeza que no importa si pasaron
los años, si nos volvimos a enamorar, si en el presente tenemos una familia,
pues siempre habrá una persona que de una u otra forma está presente en
cualquier recuerdo tuyo.
Pero saben aunque la
mayoría de veces, el resultado de estas historias solo suelen ser recuerdos y remembranzas,
tal vez un momentáneo en cuando “si las
cosas hubieran sido distintas”, el mejor final que podemos esperar para
este evento es la amistad, pues no hay amistad más sincera y duradera con la
persona que literalmente sabe todo de ti, es más quiero suponer que esa persona
realmente puede ser un verdadero “Mejor amigo o amiga dado el caso”
Me despido una vez
más esta noche, agradeciendo a mi amiga Patricia, que en un momento decidió
compartir conmigo ciertas melancolías y recuerdos personales que dieron por origen
al escrito y a la frase inicial de esta noche y como siempre estoy agradecido
con todos ustedes porque siempre se toman un momento de su día para poder leer
mis escritos.
Hasta pronto.
Luis Pablo
